Capilla de San Bartolomé

Bartolomé de Raga, arzobispo y Señor de Santiago, nos dice que «esta situada en los términos de esta parroquia y que fuera fundada en el año 1.746 por Santiago Cortizo y Lorenzo Ogando con la pensión de 76 misas anuales». El capellán actual, sigue diciendo Don Antonio, es don Manuel Cortizo presbítero de esta vecindad. Nos dice, asimismo, que «está deteriorada de paredes, puertas y de otras cosas y sin campana y le manda que la adorne y que la reedifique con decencia para poder celebrar misa en ella». En una nota se nos dice que «¿Don Manuel Cortizo se ha matado siempre por poner campana y otras cosas en la capilla de San Bartolomé la cual mandó poner el visitador por despacho del Provisor el 1 de Marzo de 1.770».

En la visita de 1.779 se nos dice que «la ermita de San Bartolomé se hallan en el término de la parroquia, que es de los vecinos y que se celebra en ella la cofradía del mismo Santo, en cuya ermita Santiago Cortizo y Lorenzo de Ogando fundaron una capellanía con la obligación de rezar seis misas y de tener la ermita decente». En la visita de 1.785 el visitador el Ilmo. Don Fr. Sebastian Malvar y Pando arzobispo y señor de la Santa Apostólica y Metropolitana Iglesia de Santiago nos dice que visitó la hermandad de San Bartolomé existente en términos de esta parroquia en la que se celebra la cofradía del mismo Santo.

«Hállase fundada en ella una capellanía colectiva con la propia advocación y pensión de seis misas rezadas cuyo cumplimiento hizo constar el actual capellán Don Benito Cortizo quién está obligado a la decencia y adorno de dicha capilla». El visitador manda poner allí una Campanilla para convocar con ella a los vecinos inmediatos a rezar el rosario.

La capilla, situada en lo alto del pueblo de A Bouza, tiene fachada retablo en la que bajo un arco de medio punto se abre la portada. Encima una fecha: «año de 1.803».

Corona la fachada una espadaña de la que pende una campana y a los lados de la espadaña dos pirámides. Al lado sur de la portada hubo un ventanuco en la actualidad cerrado. En el lateral sur se abren dos ventanucos. El ábside es rectangular. En una reforma, seguramente la de 1.803 le dieron un alto de dos metros. Va cubierta con teja plana. Encima de los muros laterales aún pueden verse restos de pizarra o losas por ser esta la primitiva cubierta. La sillería es de variada factura, gruesa en los esquinales, más fina en el hastial.

Al interior va cubierta de madera. Tiene un retablillo de dos cuerpos. El cuerpo bajo con tres calles. En la calle central lleva la efigie de San Bartolomé, en la lateral sur la de la Virgen de Guadalupe y en la lateral norte San Judas. En el cuerpo alto una hornacina sin ninguna imagen. A los lados metidos en arcos lobulados caras de niños o de angelotes pintados. Al lado de la hornacina dos esculturas pequeñas de factura popular que son las de San Salvador y Santa Lucía repintados, afincada encima del presbítero la efigie de una Virgen gótica labrada en piedra con una inscripción en la que leemos «La Virgen de Belén».

Se trata de una virgen gótica sentada con el niño en una mano y en la otra un fruto.

Destaca el realismo y la dulzura de los rostros y los rasgos de la cara de la Madre y del Niño.

En la mesa del altar o pedrella una inscripción en la que leemos «se pintó a expensas de D. Rogelio Cerdeira Lorenzo», esto en el lateral norte y en el lateral sur leemos «lo pintó Cándido Domínguez año de 1.928». Hay además en el interior de la capilla cuatro andas con San Roque, la Virgen del Carmen, San Euterio (Eleuterio) y San Bartolomé.

Tiene tribuna con balaustrada de madera.